En la actualidad la economía de España está mostrando un crecimiento más fuerte que muchos de sus semejantes en Europa occidental. El país ha salido del bache posterior a la crisis económica de 2008, y su sector inmobiliario ha seguido el ritmo de la recuperación general. Los inversores internacionales están de nuevo prestando su atención al país.
“Mirando atrás, 2014 fue el año que marcó el punto de retorno, con volúmenes de inversión que alcanzaron 3 veces los que habían sido durante los años de crisis de 2009 a 2013. Esta afirmación, expresada en cifras, no es más que una evaluación de riesgo de los inversores, la mayor parte de los cuales vienen de fuera de España. Por lo que estas ambiciosas medidas de reforma implementadas durante los años anteriores han tenido un impacto positivo en la economía de España”, dicen analistas de la consultora Catella en el último Market Tracker.
Los inversores se están ciñendo claramente a la recuperación general. Inicialmente, el interés era reducido a pequeñas Family Offices, pero éstas fueron pronto seguidas por los inversores que buscan la oportunidad, de Europa y más allá. “Ahora mismo, estamos viendo muchos inversores internacionales redirigiendo su atención a España de nuevo”, dice Dr. Thomas Beyerle, Jefe del Equipo de Investigación en Catella.
Sin embargo, esta tendencia está ya haciendo pagar el precio, como evidenció el rendimiento. Las cifras para Madrid y Barcelona son de 4,25% y 4,75% respectivamente, revelando el incremento del valor de los edificios en localizaciones atractivas.
Analizando los rendimientos inmobiliarios y comparando los resultados con los bonos del Estado a 10 años, Catella predice que el diferencial de 200 puntos básicos bajará a unos 150 para el 2018. Este es el motivo por el que los analistas esperan que la inversión aumente en ciudades como Sevilla, Málaga, Bilbao y Valencia en 2016.